Por María Eugenia De Franceschi y Victoria Gimenez 1 Año “C”
A partir de 1810, se observan tendencias en la moda que se relacionaron después con el panorama político. Mientras se mantenían costumbres españolas en la colonia, en Buenos Aires, surgió una tendencia inspirada en
Los nuevos significados del concepto de ciudadanía establecieron una conexión entre la indumentaria y los valores democráticos, ya que los textiles se asociaron con estos valores: la seda se convirtió en símbolo de la aristocracia, la lana y el algodón reflejaron la pérdida del poder noble y se identificaron con la indumentaria más accesible. Sin embargo, dejar las marcas de clase tomaría un poco de tiempo. Las sedas y los accesorios de lujo siempre sedujeron a las señoras. Los viajeros de la época mostraron la fascinación que ejercían estas mujeres que mostraban el escote y se arreglaban el pelo con esculturas que adornaban con joyas o con flores. Ningún ideal republicano podía ser tan fuerte como para dejar el lujo a un lado.
La moda europea tras la revolución fue menos ostentosa; los colores eran claros, el corte típico de los vestidos fue el llamado corte princesa, debajo del busto; los zapatos de la dama solían ser de tela y podían llevar uno que otro bordado. En el peinado, se estilaba el rodete, sostenido con una peineta, dejando caer algunos bucles al costado de ambas mejillas. Se usaba una gran variedad de telas gracias al proceso de
Debajo de los vestidos, generalmente en color marfil o blanco, se usaba una enagua del mismo género. Los hombres, acostumbraban a usar chaqueta entallada y pantalón ceñido al cuerpo, todo en color negro. Debajo, la camisa, más ceñida aún que el saco, era de color blanco. A ningún hombre de clase podía faltarle la galera y el bastón.
La variante de gala era el frac, de origen francés, cuyo uso se masificó en el siglo XIX. El saco era más corto de adelante, con dos faldones detrás. El uso de esta prenda llegó a través de España.
Aún así, existía una diferencia entre el vestido urbano y el del hombre de campo de
Todos sabemos que las modas son pasajeras tendencias que por un tiempo determinado se aferran a un estereotipo social que la gente adapta, por convicción, influencia, inseguridad, autoestima o simplemente por gusto…